Esta vida tan plácida me extingue...

De pequeña quería ser un ser ruidoso y decorativo...

martes, 30 de julio de 2013

No aprendí

Con el final más trillado.

Nunca supe cómo ser, no aprendí a hablarte, ni a escribirte,
no sabía cómo preparar el café, ese tu café que siempre aceptaste,
cuánta azúcar, cuántos granos, cuánto amor.

 No aprendí a preguntar si me querías,
ni a hacer aviones de papel que volaran a tu cielo,
me volví ignorante del amor, de la lectura de tu palma,
del eco de los silencios –muchos-

 no supe poner comas, ni acentos, ni puntos sobre las "ies"
en nuestra historia.

 no aprendí a llorar –con la luz prendida- ni ha decir cursilerías,
nunca supe dormir a tu lado, y no lo hacia,
ni a besarte en público, y mucho menos a gritar ¡Te amo!
se acabaron mis palabras sabias, si es que las tenía,
no aprendí a buscarte cuando debía,

no sabía arreglar la cama, tu cama,
ni acariciar tu espalda…
no aprendí a quedarme, aunque siempre quise instalarme,
no aprendí a sujetarme, ni a abrazarte…
            no aprendí,

 pero no desperdicie mi tiempo, ni tu tiempo,
ni tu vida, ni los sueños.

Fui ignorante de muchas cosas y vencedora en pocas,
y a pesar de no aprender de mí, aprendí de ti
y te enseñé,

extendimos las alas
y mandamos besos con el viento,
y seguí con el intento del café
y velando por las noches tus sueños.

 Seguí con los poemas y las poesías
y todos los cuentos.

 Y justo ahora, después de todo el inventario,
me doy cuento que lo que menos aprendí/que lo único que no aprendí
fue a vivir sin ti. 

No hay comentarios: